Ya me estaba aburriendo de estar leyendo encerrada en la
biblioteca cuando entraron Sofía y Natharic, esta ultima fue hasta uno de los
estantes, saco uno de los libros que yo acababa de dejar en su lugar y se lo
paso a Sofía y se fue, Sofy se sentó en el sofá mas apartado al que yo
utilizaba, pero no pasaron ni tres minutos cuando llego a mi lado y apoyo su
cabeza en mis piernas.
* Oye ¿Cómo
se supone que lea esto si no conozco este idioma?- tarde un momento en
comprender su pregunta, había olvidado por completo que todo estaba escrito en
un idioma que Sofía no conocía
- Buena pregunta… creo que primero deberías
aprender el idioma, pero yo no soy buena enseñando y ambas hablamos el
mismo idioma en este momento el cual ya no se si es español o no-conteste
sin despejar la vista del libro
* … ¿Qué
lees?
- Un poco de historia, años atrás mucho
antes de que yo naciera existió un ser que solo buscaba destruir este
mundo… o por lo menos eso es lo que las gemelas me contaron… por eso leo, para conocer la verdad por
que de ellas no me fió mucho, pero no aparece nada en los libros de
historia… creo que las 500 paginas restantes las leeré mañana, a causa de
Natharic creo que como mínimo e leído mas de 2000 paginas hoy- dije
cerrando el libro
* ¿has
estado leyendo sin tus lentes?
- Si, los lentes se quedaron en el otro
mundo, y yo…bueno en un rato de aburrimiento jugué un poco con mi vista,
ahora ya no los necesito…- apoye la cabeza en el respaldo del sillón y
observe el techo
* ¿en que
piensas?- pregunto Sofía enderezándose un poco para ver mi rostro
- En que me gustaría saber mas sobre mi
madre-le dije sonriendo- o por lo menos su nombre, en todos estos libros
la nombran como la hija de los astros… permíteme- dije parándome en cuanto
ella dejo de cargar su peso contra mi
Me puse a registrar
todo lo que estaba en la habitación hasta que di con las llaves, la biblioteca
era conformada por tres habitaciones de las cuales solo una estaba abierta a
todo ser que habitara o visitar el castillo, para las demás partes se
necesitaba la llave correcta, esta vez yo iría a los registros del castillo
* ¿A dónde
vas? ¿vuelves a abandonarme?
- Busco información y creo saber donde
encontrarla, si quieres puedes acompañarme
Detrás de un estante
estaba la puerta a la habitación donde estaban todos los libros de hechizos, me
costo dar con la llave correcta, puesto que para evitar intrusos junto a las
llaves de la biblioteca habían 6 llaves mas que no abrían ninguna puerta, creo
que en mas de una ocasión intente con la misma llave, Sofía se reía a mis
espaldas, luego de pasar esa puerta ella se abrazo a mi brazo izquierdo, yo
había olvidado advertirle que la segunda habitación estaba llena de telarañas,
la puerta siguiente estaba a la vista y esta vez me fue mas fácil dar con la
llave, la abrirla nos topamos con Simagachy, quien tenia un libro en sus manos,
la habitación casi no tenia ventanas, pero estaba llena de candelabros que
había que encender con magia por que estaban muy altos,
- Camila,
dime que buscas-dijo
sonriéndome
- Busco información sobre mi madre
- La
hija de los astros… creo que ese pequeño estante de allí atrás te puede
servir
- Gracias- Sofía gracias a el pequeño
entrenamiento que le dio Natharic ahora podía ver y entender lo que el
duende decía, llena de curiosidad se le acerco a ver que leía
- Es
un álbum fotográfico de la princesa años atrás, en su mayoría son dibujos
que la gente hacia de ella antes de que comenzara a habitar el castillo,
vez este de aquí dice: “la nieta de los astros bañándose junto a la guardiana de agua”
Yo escuchaba desde
donde estaba revisando los libros, me relaje al saber que en su mayoría eran
dibujos, creo que las peores fotografías que e visto sobre mi han sido las del
mudo humano.
Un libro me llamo la
atención, lo tome y fui a sentarme al lado de Simagachy y Sofía a hojearlo, así
podía quitarles el álbum en caso de que hubiera alguna imagen vergonzosa (ya
había visto fotografías mías vergonzosa, eran las que la madre de las gemelas
había hecho de mi cuando yo estuve bajo su cuidado)
Me concentre en el
libro que tenia en mis manos, al abrirlo en la primera hoja observe una imagen
de una niña de unos 4 años, abajo decía: “Seraphine jugando con su gatita
Sophie”, al reverso de la hoja estaba escrito: “la hija de los astros no le
teme ni a la oscuridad, cuesta mucho lograr que se duerma, según ella Sophie es
una gatita, no quiere entender que una cachorra de león puede ser muy
peligrosa, me da miedo que Sophie muerda a mi querida Elizabeth… A pesar de su
corta edad Seraphine habla correctamente, incluso mejor que yo, hace muchas
cosas inexplicables, en un par de años mas la llevare ante los magos, puede que
ellos me expliquen que es lo que debo hacer”, me había concentrado tanto
leyendo que no note que Simagachy y Sofía estaban a mi lado leyendo lo mismo
que yo leía
v
Seraphine…
tu madre tenia un lindo nombre- dijo Sofía
- Hablando
de nombres, Shaylee me dijo ayer que es posible que las gemelas intenten
volver a la gente en tu contra, ahora mismo tu nombre es muy peligroso
para ti, puesto que al ser conocido por ellas pueden ensuciarlo y hacer
que la gente te odie al saber como te llamas, entre los dos pensamos que
será mas seguro para ti adoptar otro nombre.
- ¿otro nombre? No, no puedo, este nombre no
es solo el que tenia yo en este lugar, es también el nombre que me fue
otorgado en el otro mundo, este nombre soy yo, cambiarlo seria cambiarme a
mi
v
No
necesariamente te cambiarias a ti, nosotros sabemos tu nombre, aunque adoptes
otro seguirás siendo la misma persona para nosotros
- ¡No quiero!- dicho esto Salí corriendo de
la biblioteca, me fui a mi dormitorio, en el camino casi choque con Alimac
y Natharic, me encerré y no Salí hasta que me fueron a buscar para que
bajara a cenar
Llegue al comedor y
bajo la mirada de mis tres acompañantes
me senté en silencio
Alimac fue la primera
en hablar
- Camila, Sofía y Simagachy ya nos contaron
lo ocurrido, y me temo que tienen razón, ahora mismo no es conveniente que
conserves tu nombre
- Es por tu propia seguridad que te decimos
esto, si quieres nosotras podemos
sugerirte nombres- fue raro escuchar a Natharic ser cariñosa con alguien,
las tres nos quedamos extrañadas cuando la escuchamos y ella al notar eso
se quedo en silencio, luego con
Alimac comenzaron a decir un lista de nombres
- Ursula- inicio Alimac
- Rebeca- continuo Natharic
- Jazmin
- Elizabeth
- Ester
- Javiera
- Alejandra
- Victoria
- Constanza
- Charlott
- Aliette
- Clara
- Laura- Alimac comenzaba a quedarse sin
ideas
- Andrea- dijo Natharic luego de pensar un
rato
* Yo creo
que seria mejor Seraphine, era el nombre de su madre- dijo Sofía mirando a
ambas, luego las tres se volvieron a mirarme
- Seraphine… ¿no crees que seria muy obvio
cambiar mi nombre por el de mi madre? Las gemelas se darán cuanta de
inmediato
* Por eso
mismo lo sugiero, por que al ser tan obvio…
- Al ser tan obvio las gemelas sospecharan
de su propia intuición y seguirán buscando a Camila, no a Seraphine-
dijeron Alimac y Natharic al mismo tiempo interrumpiendo a Sofía
- Esta bien- dije luego de un suspiro- me
quedo con el nombre sugerido por Sofía, después de todo es a la vez el
nombre que mas me agrado de todos los que sugirieron ustedes
- Muy bien, ahora nosotras pensaremos en
como perfeccionar el cambio de nombre- dijeron ambas levantándose y
dejándome sola con Sofía
- ¿Por qué se te ocurrió sugerir ese nombre
en realidad?
* Por que en
el mundo del cual ambas venimos uno de los significados del nombre Camila es
“la que esta presente en dios” ¿cierto? Y Seraphine significa “ángel flamígero”
y es utilizado, para nombrar a los
Ángeles mas puros que rodean a un dios, así que como ambos nombres están
prácticamente relacionados con lo mismo se me ocurrió sugerirlo, aunque no se
que signifiquen en este mundo- dijo sonriendo, mientras esperaba a que yo
terminara de cenar
- ¿Cómo obtuviste esa información?
* Lo leí
hace tiempo en un libro, ni yo sabia que recordaba eso
En cuanto termine de
cenar me levante y me fui directo a mi habitación, Sofía se habia quedado en el
comedor por que quería saber quien preparaba nuestras comidas y limpiaba los
platos.
En medio de la noche
desperté con la sensación de que había alguien en mi cuarto, para mi sorpresa
era cierto, aunque mas que en mi cuarto era en mi cama, me asuste al ver a
Sofía durmiendo a mi lado, no tuve corazón para despertarla, por lo que lo mas
silenciosa que pude me levante y fui hasta su habitación para tratar de
descubrir por que se había ido a dormir a mi cama, en cuanto entre pude ver la
razón, Natharic había llenado su habitación con espejos y Sofía a pesar de ser
media egocéntrica y vanidosa no soportaba los espejo de cuerpo completo, y
menos aun 10 espejos de esos, yo la entendía era molesto y aterrador sentirme
vigilada por tantos reflejos así que cerré la puerta rápidamente y corrí a mi
habitación, solo por esta noche le permitiría dormir a Sofía en mi cama, ahora
si no quería dormir en una pieza sola buscaría la forma de trasladar su cama a
mi habitación por que no me molestaba compartir pieza, pero si cama, me acosté
intentando no despertarla, ella inmediatamente me abrazo, por un segundo pensé
que ella se había despertado, pero me di cuenta de que no era así, ella seguía durmiendo
profundamente.
Al despertar al día
siguiente Sofía tenia su cabeza apoyada en mi hombro, al moverme un poco ella
se dio una vuelta hasta terminar abrazándome, pase mi mano libre por su cuello
y ella despertó de inmediato.
* Mala no
hagas eso-protesto inmediatamente
- Nadie te mando a invadir mi cama, ahora
¿sueltas mi brazo? Creo que ya se me durmió
* No quiero
- Suéltame ya
*
No
No me quedo de otra
que amenazarla
- Si Natharic te ve en mi cama te retara-
dije antes de salir de mi habitación, me dirigí al jardín y me puse a
jugar con el agua de la fuente acostándome en el borde de esta, no me di
cuenta cuando se me acerco Natharic, hasta que me empujo y caí al agua
- ¿Por qué hiciste eso?
- Por estar en pijama en el jardín, ahora ve
y vístete, y busca la forma de secarte yo no te pasare ni una toalla
El agua estaba helada
por lo que llegue tiritando a mi cuarto, Sofía seguía acostada en mi cama
* ¿Qué te
paso?- me pregunto saliendo de la cama
- ¡nada!- le respondí enojada
* Gruñona-
dijo antes de salir de mi habitación
Una vez sola comencé a
secarme usando para ello un vestido de algodón, una vez totalmente seco mi
cuerpo envolví mi cabello con el vestido, como tenia frió me puse primero la
ropa con la que había llegado a este mundo y sobre ella un vestido tan largo
que tenia que levantarlo para no pisarlo, pero con las zapatillas puestas no
tenia que preocuparme tanto, para mi alivio el vestido tapaba las zapatillas
por lo que las demás no se darían cuenta, una vez abrigada intente secarme el
cabello, pero como siempre era casi imposible, en eso volvió a entrar Sofía,
vestía un vestido de algodón rosado y pantis blancas, y al ver mi cabello me
quito el cepillo y comenzó a peinarme
- Auch, se mas cariñosa, tengo todo el
cabello enredado
*Lo se,
pero dime ¿cuando e sido cariñosa al peinarte?
- Tienes razón- dije cerrando mis ojos, los
volví a abrir cuando ya había terminado de desenredar mi cabello
* Dime… ¿ya
se te paso lo gruñona?- dijo con una sonrisa
- Si- dije riéndome
Al poco rato entro
Alimac y al ver mi cabello mojado me sugirió secarlo con magia o de lo
contrario terminaría enfermando, iba a hacerlo pero Sofía empezó a rogar que le
dejáramos a ella secarlo, le dije que tenia que hacer para que pudiese producir
el calor suficiente para no quemarme el cabello, ella estaba feliz, Alimac y yo
teníamos miedo, ambas nos relajamos cuando mi cabello estuvo totalmente seco y
para mi alegra ni una sola mecha se quemo o daño, Alimac recordó a que había
subido y nos aconsejo bajar a desayunar, le dije a Sofía que bajara, pero quiso
bajar conmigo, bajamos y antes de dirigirme al comedor le dije que se me había
olvidado algo en mi cuarto y me fui corriendo hasta la puerta principal, Salí y
no deje de correr hasta llegar a la cascada donde sabia encontraría a la
guardiana del agua, en cuanto llegue ella apareció inmediatamente, luego de
saludarla le conté lo del cambio de nombre con la esperanza de que ella opinara
lo contrario que los demás, pero no fue así, apoyo la idea, por el rato que yo
llevaba despierta sin haber ingerido alimento alguno empecé a sentirme mal,
ella al notarlo me dijo que subiera a su lomo y me llevo volando al castillo.
Aterrizamos en el
jardín, Natharic y Alimac alertadas por el sonido de las alas de la dragona ya
estaban allí junto con Sofía que las había seguido, pude ver que las tres
estaban enojadas, Alimac y Natharic comenzaron a regañarme por salir sin alguna
de ellas, pero Sofía las interrumpió y me reto por salir sin desayunar
*
Es mejor
que te vayas a desayunar, mira que estas muy pálida- me dijo finalmente
cruzandose de brazos
En cuanto baje del
lomo de la guardiana ella adopto su forma humana y me llevo hasta el comedor,
poco le falto para darme ella misma de comer, cuando ya comencé a sentirme
mejor Sofía se me acerco y se abrazo a mi brazo
*
No vuelvas
a hacer lo mismo nunca mas, ¿entendiste?- yo sabia que ella lo decía por
haberla dejado sola con mis guardianas
Como toda respuesta le
sonreí, luego mire a mi madre agua, Sofía fingió no darse cuenta, pero las
demás notamos que mi madre la miraba fijamente, luego como reaccionando se
despidió y se fue
“no puede ser”-pensaba mientras volaba a reunirse con los
otros 3 dragones
- ¿Cómo SE TE OCURRE SALIR SIN ALGUNA DE
NOSOTRAS?¿NO ENTIENDES QUE ES MUY PELIGROSO QUE SALGAS SOLA?- me grito
Natharic
Yo la ignore, estaba
furiosa por lo de hace rato, era su culpa que yo me cayera a la fuente en la
mañana, ¿que pasaba si me enfermaba a causa de eso? Simplemente ella me retaría.
- Seraphine, sabes que no debes salir sin
tus guardianas, recuerda lo que el circulo y los guardianes nos dijeron-
debo admitir que Alimac tenia razón, yo había hecho una tontería, pero ya
comenzaba a sentirme prisionera en este lugar nuevamente- iré a hablar con
los ancianos a contarles lo de tu cambio de nombre- dicho esto Alimac se
convirtió en leona y se fue corriendo
- NATHARIC, ENSEÑALE EL IDIOMA A SOFIA- le
grite antes de irme a la biblioteca, no espere respuesta y me puse a leer
entre los estantes confiando en que nadie me encontraría, pero me
equivoque, a las dos horas después Sofía llego a mi lado.
*
Cami…
Seraphine, dime que te pasa, lo veo en tus ojos así que no me digas que nada
- Déjame- dije dándole la espalda
*
No, dime-
comenzó a exigir
- ¿es que a nadie le importa mi opinión
aquí?, lo único que escucho es has esto, has esto otro, no hagas tal cosa,
cambia tu nombre … ¿acaso yo no puedo decidir?- le respondí enojada
Ella no respondió, era
primera vez que me veía asi desde que me conocía, comencé a caminar para
alejarme de allí, pero ella me tomo del brazo, yo estaba tan furiosa y con
deseos de estar sola que sin darme cuenta le di una bofetada, en cuanto lo hice
reaccione, ella no tenia la culpa de lo que pasaba
- Sofy, perdona, yo… yo no quise… perdona-
comencé a decir al tiempo que la abrazaba
Ella no respondía,
estaba enojada y sorprendida a la vez, como yo la tenia abrazada pude notar que
intentaba de alguna manera devolverme el golpe
- Perdona- repetí estaba vez llorando, no
podía soportar la idea de que yo misma la hubiese lastimado
*
¿COMO TE
ATREVES A PEGARME? ¡PEGARME A MI TU UNICA AMIGA VERDADERA EN ESTE MUNDO!-
comenzó a decirme, yo deje de abrazarla para mirar su rostro, en su mejilla
derecha tenia mi mano marcada, ella vio que yo estaba llorando y dejo de
gritarme- tonta, tu me pegas ¿y te pones a llorar?- dijo intentando hacer que
yo dejase de llorar, yo acerque mi rostro al suyo y le di un beso justo en el
centro de la marca del golpe concentrándome en usar mi magia para que le dejara
de doler y no le quedara marca alguna, por segunda vez en el día ella se
sorprendió, no se esperaba que yo hiciera eso, entre los estantes frente a
nosotras había un espejo y ella al ver que no tenia marca alguna de mi golpe y
tampoco le dolía , se alejo de mi y me dio la espalda- no creas que con eso te
perdonare, quiero papas fritas así que me haces papas fritas y te perdono
- ¿me ayudas?, por que dudo que queden para
ti si me dejan sola con las papas fritas- exclame sonriéndole y Lugo ambas
reíamos
Al salir de la
biblioteca note que estábamos solas en el castillo
“Natharic salio hace
poco, se veía preocupada”- me dijo Sombra, yo le agradecí la información y me
puse a buscar la cocina junto con Sofía
- En todo el tiempo que llevo en este
castillo nunca en visto a nadie acarreando platos, la comida simplemente
aparece en el comedor, por lo que creo que la cocina estará en algún lugar
cercano a el- le comente
*
Entonces
iniciemos la búsqueda en el, por que no te salvaras de hacerme las papas fritas,
con ellas solo te perdonare un poco, por lo demás ya se me ocurrirá
Entramos al comedor,
la mesa estaba limpia, las cortinas dejaban entrar la luz del sol y en la
muralla había un cuadro enorme, era un hermoso paisaje. Por mas que miramos
solo estaban las puertas que daban al corredor, las demás puertas en el
corredor estaban cerradas con llave a excepción de las que daban al patio
interno.
*
Aunque
tengamos que echar las murallas abajo encontraremos la cocina- comenzó a decir
Sofía apoyándose en el marco del cuadro a escasos centímetros de mi, por poco y
no alcanzo a afirmarla cuando el cuadro se corrió dejando al descubierto una
puerta, sin soltar a mi amiga estire un brazo para ver si estaba abierta o
cerrada, grande fue nuestra sorpresa al ver que estaba abierta y tras ella la
cocina.
- Por fin- exclame- ¿hola? ¿Ahí alguien
aquí? Vamos a entrar
Nadie contesto, la
cocina estaba vacía, comprobé que Sofía estuviera bien firme sobre sus pies
antes de soltarla y entrar.
La cocina era enorme,
la despensa estaba llena de comida, un armario guardaba una gran cantidad de
platos, mínimo unos cien, pero me llamaba la atención de que a diferencia del
resto del castillo la cocina parecía ser aun mas antigua que las demás
habitaciones, me puse a caminar cuando note que en una esquina el suelo no era
de piedra, sino que de madera.
- Sofy, mira, una puerta- dije tras
comprobar que estaba sin seguro
*
Veamos que
hay bajo el castillo
- Pero, debe estar oscuro
*
No seas
cobarde vamos- dijo abriendo la puerta y tomando mi mano me tiro escaleras
abajo tras ella
- Sofy volvamos a subir, ¿no quieres acaso
tus papas fritas?- dije con los ojos bien cerrados y apretando su mano
*
Si las
quiero, pero quiero saber que hay aquí
- Sofía por favor subamos, te preparo unas
papas fritas, buscamos una vela y volvemos a bajar-dije desesperada
*
Esta bien-
dijo al notar el tono de mi voz- pero no puedes temerle a la oscuridad y menos
si estas conmigo- agrego mientras subíamos
Una vez de vuelta en
la cocina saque de la despensa unas cuantas papas, busque un cuchillo y me puse
a pelarlas y cortarlas, Sofía por su parte busco la olla y el aceite, cuando
estuvieron listas las vacié todas en un plato y las lleve al comedor, me senté
frente a mi amiga mientras ella comía, pero mi mente estaba en otra parte, ese
cuadro me parecía familiar, en el paisaje se veía un claro en el bosque, pero
aun así creo que lo conocía.
En cuanto Sofía
termino de comer tome el plato y fui hasta la cocina para lavarlo, grande fue
mi sorpresa al notar que había una anciana en la cocina
- ¿Quien es usted?- pregunte asustada, a mi
lado sombra gruñía
- Princesa, discúlpeme por asustarla, mi
nombre es Charlott, desde mi muerte e estado en este lugar del castillo,
en un intento de así limpiar el honor de mi familia a causa de el
asesinato que cometió mi hija Elizabeth, los cuatro guardianes me
permitieron permanecer en este mundo para servirla a usted como cocinera-
explico
- ¿Su hija Elizabeth?... ¿desde su muerte?
¿Es usted un fantasma?
- Si, soy un fantasma, y lamentablemente
también soy la madre de quien mato a tu madre, la pintura que cubre la
puerta es lo que me permite permanecer en este mundo, ese claro, es el
mismo donde encontré a tu madre y donde tu naciste
*
Seraphine,
¿Por qué tardas? Alimac te busca- grito Sofía desde el comedor
- Debe irse princesa, seguiremos hablando en
otra oportunidad- dicho esto desapareció
Fui hasta el jardín,
donde me esperaba Alimac
- El concejo decidió en unas cuantas semanas
mas será su coronación, por lo que usted y Sofía deberán ver sus vestidos
y como lucirán ese día, Sofía te incluyo también, por que tu serás la
acompañante permanente de la princesa y después de la reina
*
Entendido
- Iniciaremos con sus vestidos, iremos a la
mejor modista de la ciudad, así que vístanse para salir, y Seraphine, la
ropa que llevas puesta bajo el vestido déjala al fondo del ropero
Sofía me quedo mirando
atenta, yo Salí corriendo para ocultar esa ropa, pero fui muy lenta al cerrar
la puerta al tiempo que me sacaba el vestido y Sofía me descubrió
*
Jeans,
zapatillas y polera morada… ¿y así no me dejan a mi usar mi ropa normal?
- No me quedo de otra, ahora ve a cambiarte,
dije encerrándome en el ropero
Una vez listas salimos
con Alimac, Sofía describió sus vestidos y yo hice lo mismo, al día siguiente
debíamos volver para que nos tomaran las medidas, al regresar ambas nos fuimos
a mi cuarto
- Dime, como te piensas peinar ese día
*Aun no lo
se, pero me gustaría tanto parecerme al ángel que veo en mis sueños…- comenzó a
decir, pero antes de alcanzar a describirla su aspecto cambio por completo
Ambas nos
preguntábamos que había pasado cuando entro Natharic, al verla se quedo un rato
en silencio y luego hablo
- El otro día ella bebió un poco de tu
sangre, en tu sangre corre magia pura, lo cual reacciono ante el deseo de
ella, esperemos sea lo único que haya hecho tu sangre, no quiero que los sirvientes se asusten,
así que dejen de estar jugando- dijo mientras se iba
- Vaya, yo no sabia que mi sangre pudiera
hacer eso, es raro verte con piel tan clara y mas alta… estas casi de mi
porte, pero creo que mas alta que yo, diría que mides… un metro sesenta y
cinco, si no me equivoco
* Jejeje,
oye ¿Por qué no cambias tú también tu imagen? Así las gemelas menos te
reconocerán
- Ya, ¿ahora quieres que me cambie el color
del pelo a verde, y que mida un metro ochenta?
* Natharic
se enojaría, así que si
- Jajaja… no es mala idea- dije intentando
evitar el tema, no quería cambiar
- Seraphine, te buscan en el salón, apurate-
grito Alimac
- Acompáñame- dije tomando a mi amiga del
brazo
En el salón me
esperaban los cuatro guardianes
- Veo
que estas bien acompañada pequeña- me dijo mi padre tierra mirando a Sofía
- Estimados guardianes, ella es mi amiga
Sofía llego desde el mundo humano por su propia cuenta, Sofy ellos son los
guardianes de los cuatro elementos y mis padres y madres
- Se
bienvenida joven humana-
dijeron los cuatro
*
Gracias-
dijo casi sin habla
- Seraphine,
hemos estado hablando y pensamos que seria mas seguro para ti, perder tu
imagen actual- al
escuchar esto no puede evitar lanzarle una mirada asesina a mi amiga- y para ello cada uno de nosotros hará
un cambio en ti
Asentí en silencio y uno a uno los dragones se me acercaron y con su
poder generaron un cambio en mi apariencia, a lo lejos Natharic y Alimac
observaban
Cuando los guardianes se fueron yo fui hasta la habitación de Sofía y me
mire en los espejos, me resigne a que ya no era Camila, no solo por que ahora
ese no era mi nombre, sino por que tampoco lo era mi apariencia, Camila tenia
el cabello castaño claro, tez semi pálida por la exposición al sol, media un
metro sesenta y dos y por supuesto no era de pestañas largas y curvas, yo, en
cambio, tenia el cabello semi castaño claro, con reflejos verdes, tez pálida
(casi tan pálida como Sofía cuya piel mas se parecía a las escamas blancas de
mi madre agua), media un metro setenta, y mis pestañas mas parecía que fueran
postizas, quise llorar, pero solo derrame una lagrima en adiós a mi antiguo yo
y me resigne totalmente, de hoy en adelante me comportaría como una verdadera
princesa y Sofía seria la única que sabría como me sentía realmente, aunque
fuera por medio de la magia yo le enseñaría este idioma, no permitiré que nadie
la aleje de mi lado, por que ella es la única que realmente me entiende.
Salí y ella me esperaba en el corredor
* Seraphine
¿que ocurre?
- Sofy te lo pido, nunca te separes de mi lado, tu eres la única que realmente me entiende, tengo miedo de que llegue el día que aparezca la persona que llego conmigo o su cadáver, no se que debo hacer, aquel ser no pertenece a este lugar, pero tampoco puede volver y para que forme parte de este mundo tendría que destruir su cuerpo y así su alma formaría parte de este mundo en un nuevo ser, pero yo no soy capaz, por ti no me preocupo en ese aspecto, por que Shaylee y Sigamachy ya me han dicho que tu tampoco pertenecías al otro mundo- dije mientras la abrazaba
* Simplemente
abría que eliminar a esa persona, no te preocupes de eso me encargare yo,
Natharic me pidió que no permitiera que tu alma se ensuciara, pero aunque no me
lo hubiese pedido yo tampoco lo permitiría- comenzó a acariciar mi cabello,
mientras me conducía a mi pieza y yo me quede dormida
Desperté al día siguiente aun con el vestido puesto, a mi lado estaba mi
amiga, se veía cansada por lo que no la desperté, baje las escaleras y me
encontré con Alimac, quien leía una carta
- Princesa, pronto, como en unas dos semanas, nos visitara el conde de Blackwood, espero haya terminado de leer y recuerde sus modales- dijo, y al pasar por mi lado dijo a mí oído- si las gemelas caen en la trampa y vienen para su coronación podremos destruirlas con ayuda de el, no podemos arriesgarnos a que Sofía conozca tu verdadero poder
- Entiendo
- Por ello, el concejo y los guardianes quieren dormir parte de tu poder, para que así seas menos reconocible- al escuchar esto me quede casi sin habla pero luego al pensar en el peligro que corrían todos por mi simple presencia tome mi decisión
- Esta bien ¿cuando será eso?
- En cuanto estés lista
- Vamos de inmediato- dije, ignorándome a mi misma
Alimac se sorprendió,
pero no dijo nada, solamente me puso una capa encima y nos fuimos a la mansión
del concejo, en el camino yo solo pensaba en la joven que dormía en mi cama, si
yo dormía parte de mi poder, era menos las probabilidades de que aquella Sofía
de piel clara, ojos celestes, cabello negro con reflejos azules, tuviera que
luchar y ponerse en peligro, los ancianos se sorprendieron al verme llegar, no
esperaban mi cambio de imagen y menos ver que había aceptado que durmieran gran
parte de mi poder, los guardianes también estaban allí con su aspecto humano,
gracias a ellos terminaron en solo un par de horas…. Creo, en cuanto comenzó
todo yo comencé a sentir sueño y me dormí, cuando desperté horas después, me
entregaron un pequeño frasquito que colgué de mi cuello
- Cuando quieras despertar todo tu poder
abre el frasco y bebe su contenido, no te preocupes es un poco de tu
propia sangre- me explicaron
- Esta bien, ¿podemos regresar al castillo?
Quiero leer un rato- le dije a Alimac
Regresamos y tomando
un libro de la última sección de la biblioteca me fui a mi cuarto, el libro era
mi propio diario de vida, me asegure de que Sofía siguiera durmiendo y escribí:
“dos de agosto del 2012(año en el mundo
humano) , ayer la princesa Camila murió, yo Seraphine tomo su lugar en este
reino, de no haber vuelto a este mundo ella no hubiese muerto y yo nunca
hubiera llegado a ser la futura reina…” interrumpí la escritura para ir
hasta el ropero y tome los dos celulares que tenia escondidos, deje el mió
sobre el diario y mirando el otro pensé “antes
de que Sofy destruya a su dueño, yo debo devolverlo, es lo correcto”
Un ruido a mis
espaldas me hizo ocultar todo con un vestido y me volví
- Hasta que despiertas- le dije a Sofía
* Buenos
días- dijo, para mi sorpresa en el idioma de este reino, yo le había hablado en
español, por que no estaba segura de que me entendería ahora que mas de la
mitad de mi poder dormía
- ¿Cuando aprendiste este idioma?
* ¿A que te
refieres?- dijo restregándose un ojo- es tu presencia la que me permite
entender este idioma
- Escúchate al hablar
Eso hizo, y al
escucharse se sorprendió
- Dejémoslo en secreto hasta que sepamos que
ocurrió
Ella asintió incapaz
de hablar, bajamos a desayunar y luego salimos con Alimac a la modista, en unas
semanas mas llegaría el conde de Blackwood y mis guardianas ya habían enviado
las invitaciones para la coronación a los demás nobles, diplomáticos de otros
reinos, etc… yo había insistido en que
invitaran a Han Sang Kyung y a la ángel que había visto aquella vez en el infierno,
por lo menos con Han Sang Kyung cerca me sentiría mas en confianza, debido a
que ya lo conocía y el me agradaba, por lo que pensar en la coronación ya no
era un suplicio para mi.
Y así transcurrió una
semana, entre acostumbrarme a no tener todo mi poder, estudiar modales,
acostumbrarme a tantos sirvientes, aprenderme sus nombres, enseñarle magia
básica a la Sofía, ir a probarnos los vestidos, ir a probarme la corona y la
tiara, repasar la lista de invitados y ver las costumbres de los distintos
reinos, todos los días terminaba exhausta y me dormía de inmediato, incluso
entre lecturas en las tardes me dormía, así no me di cuenta de las
remodelaciones que hicieron en el castillo, decoración nueva, también Alimac
había organizado un “funeral” para Camila, para así despistar mas a las
gemelas, no solo yo estaba cansada Sofía también y constantemente tenia que
recordarle que no hablara en mi ausencia lo que la ponía de mal humor y me
contagiaba ese humor, hasta el punto que Natharic nos encerró todo un día en mi
cuarto hasta que aprendimos a disimular el mal humor, aunque eso creyó ella,
nosotras aprovechamos de descansar y dormir todo el día, los celulares y mi
diario de vida seguían bajo el mismo vestido, en el mismo lugar que lo había
dejado días atrás, sabia que en alguna parte de su cuarto Sofía guardaba su
celular, aun no le decía que lo mantuviera siempre oculto por que simplemente
no entendería, ese día de castigo fue para nosotras como volver a estar juntas
en el colegio, ella se apoyo en mi para descansar y se durmió mientras yo
acariciaba su cabello, finalmente apoye mi cabeza en la suya y me dormí, al
despertar con el cuerpo entumecido moví mi cabeza para molestarla y que así
fuera despertando poco a poco, luego cuando se movió a torture un poco
aprovechando que sabia su punto débil, así ella dejo de apoyarse en mi un
segundo antes de que Natharic entrara, junto a la leona Alimac, hacia tiempo
que no la veía en esa forma
- ¿Ocurre algo princesa?- me pregunto al ver
que la observaba
- Es solo que me acabo de dar cuenta que te
pareces a Sophie, la leona de mi madre
- Si, es cierto, eso es por que esa leona no
era animal, era un espíritu, mas bien era el familiar de tu madre, Sophie
es la leona de la luna llena y segundos antes de morir tu madre le encargo
que te cuidara, pero ese espíritu se fundió conmigo al momento de mi
creación- explico
- ¿Cómo sabes eso?
- Estuve averiguando sobre mi misma- me
respondió
- Basta de charlas, Seraphine, Sofía bajen a
cenar, no han comido nada desde el desayuno, lo cual me sorprende por que
varias veces las e visto rondar la cocina-dijo Natharic, nosotras no nos
hicimos de rogar, moríamos de hambre
- Seraphine, mañana comienzas tus lecciones
de baile para la coronación- me dijeron mientras cenábamos
“Lecciones de baile, cuando yo odio bailar…
como podían ser tan crueles conmigo, por que mejor no me matan y ya, así me
evitarían muchos problemas, ¿a las gemelas les agradaría si me entregaba a
ellas?” pensaba, pero me
limite a asentir en silencio, a mi lado Sofía se reía de mi hasta que…
- Tu también tendrás lecciones de baile y etiqueta Sofía así que nada de risa
- Muy bien, Seraphine, deberías aprender de tu amiga
- · Claro, ella solo lo dice para molestarme nomás- dije fingiendo enojo
Ya estaba comenzando a
pensar que lo mejor seria que huyera y me fuera a vivir a otro reino lejos de
este, aunque lo peor se venia acercando
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